Las mejores lámparas vintage de cuerda del 2025

Este par de lámparas colgantes con cuerda de cáñamo de LDERFIV tiene un rollo retro industrial que queda genial en espacios con un toque rústico o vintage. Son perfectas para decorar desde un comedor o bar hasta una cafetería con personalidad, y gracias a su diseño sencillo, se adaptan sin problemas a diferentes estilos. La cuerda mide unos 99.06 cms de largo, lo que te permite jugar con la altura sin complicarte, ideal para techos altos o espacios donde quieres dar un punto original sin líos con cableados.

Lo que me mola es que usan bombillas E27, que son fáciles de encontrar, y el portalámparas de plástico asegura una buena seguridad, evitando problemas eléctricos. Además, la cuerda de cáñamo natural es resistente y flexible, por lo que no ves que se rompa con el tiempo. Trae todo lo necesario para montarlas rápido, así que si no eres muy manitas, tampoco hay drama. En resumen, si te va ese toque industrial pero sin complicaciones, parece un artículo que cumple sin hacer ruido.

La lámpara de TECNOLUX EURO con cuerda de cáñamo tiene un rollo vintage que pega mucho para decorar espacios como la cocina, el comedor o incluso una cafetería con ambiente rústico y acogedor. Es ideal si quieres darle un toque diferente a tu casa o negocio, porque no solo ilumina, sino que también sirve como elemento decorativo gracias a la cuerda con la que puedes hacer nudos o diseños que le dan personalidad propia.

Lo que me mola es que funciona con bombillas E27, así que puedes escoger qué luces poner según el estilo que busques o la intensidad que necesites (ojo, la bombilla no viene incluida). Además, con su voltaje estándar de 220-240 V y un peso ligero de 0.45 kg, se instala sin líos en casi cualquier sitio. Visto así, parece un complemento fácil y con bastante estilo para quien busque algo más que una simple lámpara.

Este portalámparas de Fdit con cuerda de cáñamo de 2 metros tiene un rollo muy guay para quienes buscan darle un toque industrial y vintage a su espacio. Imagina una lámpara que encaje tanto en un bar con encanto como en una sala de estar con estilo más rústico; la textura natural del cáñamo aporta un aire cálido que no resulta nada frío ni impersonal. Además, al ser una cuerda resistente, parece que está pensada para aguantar bien el uso y el paso del tiempo sin perder esa esencia campestre.

Lo que me convence es que tiene una base E27 estándar, así que es fácil encontrar la bombilla que quieras, y con 2 metros de largo no tendrás que complicarte con extensiones, lo cual es un plus para espacios con techos altos o para jugar con la altura de la luz. Está fabricada con un diseño sencillamente curioso, 7.62 cms de alto x 15.24 cms de largo x 10.16 cms de ancho, que facilita ponerla en cualquier rincón sin que ocupe demasiado. La verdad, es un detalle que puede marcar la diferencia en la decoración sin ser demasiado aparatosa. Si buscas algo con carácter y facilidad para instalar, te lo recomiendo.