Las mejores cortinas vintage del 2025

La cortina de Sutuo Home en color Azul ofrece un estilo bohemio elegante que transforma cualquier espacio. Con sus costuras cuidadas y un patrón de rayas francesas, esta cortina añade un toque decorativo único gracias a sus borlas hechas a mano. Su diseño semiopaco permite filtrar la luz sin sacrificar la privacidad, perfecto para cualquier habitación que busques adornar.

El panel es bastante versátil, ideal para dormitorios, salas de estar, o incluso cafeterías y restaurantes, aportando un aire vintage a la decoración. Su mantenimiento es sencillo, ya que se puede lavar a mano o a máquina en un ciclo suave. Con un tamaño de 52 pulgadas de ancho y 84 de largo, se adapta a diferentes ventanas y estilos. Sin duda, una opción que combina funcionalidad y estética.

Para quien busca dar un aire diferente y algo rústico a su cocina o esas ventanas pequeñas sin complicaciones, estas cortinas de TOPICK con estampado floral en tonos marrones pueden encajar muy bien. Su tamaño, 65 x 90 cm, las hace perfectas para rincones como el lavadero o la salita, y el tejido mezcla lino con poliéster para un toque natural pero resistente. Además, el bolsillo para varilla facilita mucho la instalación, lo que siempre viene bien cuando quieres evitar rollos.

Lo que me parece interesante es que reducen la entrada de luz sin dejar la habitación a oscuras, ideal para esos momentos en que quieres ver la tele sin reflejos molestos. También se lavan sin líos a 30 grados y se planchan fácil, que para las cortinas es un plus porque nunca apetece tener que hacer milagros con ellas. En resumen, son prácticas y con un diseño sencillo que no choca en ningún espacio. Si te gusta el rollo vintage pero sin pasarte, pueden ser justo lo que buscas.

Esta cortina de ducha de Estmy tiene un rollo setentero súper llamativo con esos colores amarillo y naranja que no pasan desapercibidos. Va genial para quien quiera darle un toque distinto y alegre al baño, especialmente si te mola el estilo bohemio o psicodélico. Además, la tela es bastante resistente y cómoda, mucho más agradable que las típicas cortinas de plástico, lo que seguro que se nota al usarla a diario.

Lo que mola de verdad es que la cortina es impermeable con un revestimiento que hace que el agua resbale y se seque rápido, evitando esa sensación pegajosa de las cortinas húmedas. También tiene un peso en la parte inferior que ayuda a que no se mueva con el aire, algo que suele ser un rollo cuando duchas. En definitiva, si buscas una cortina que aporte buen rollo y sea práctica en el día a día, esta puede encajar sin complicaciones.